Gastroenteritis y gripe son dos patologías frecuentes en esta época del año tanto que suele tomar un nombre propio "gripe estomacal".

Esta gastroenteritis viral se desarrolla con una inflamación  o hinchazón del estómago y los intestinos a causa de un virus, esta infección suele venir acompañada diarrea y vómitos.

Seguramente se verá reflejado en este artículo pues seguramente su gripe ha cursado fundamentalmente con este tipo de síntomas estomacales.

Son muchas las consultas al respecto que hemos tenido en la farmacia esta semana, pacientes que acuden con náuseas y vómitos, síntomas característicos de la gastroenteritis, enfermedad que produce una inflamación de la mucosa gástrica e intestinal.

A parte de los mencionados anteriormente, los síntomas más comunes de la gastroenteritis son la diarrea, característica por ser de heces muy líquidas o blandas, náuseas, vómitos, fiebre o dolor abdominal, que suele curar a los pocos días.

Empiezan las vacaciones y para aquellos afortunados que tienen pensado emprender un merecido viaje, deberían tener en cuenta no solo qué van a meter en la maleta, sino también las características sanitarias de la zona a la que vamos a viajar, para ello es fundamental conocer las parasitosis locales (enfermedades causadas por parásitos) para poder aplicar una correcta prevención.

Es fundamental saber cómo se transmiten las enfermedades: por consumo de alimentos mal procesados, por consumo de agua contaminada, por picaduras de insectos o por contacto directo con el parásito.
Y es que además de la típica diarrea del viajero y las gastroenteritis más o menos aguda, hay enfermedades más graves que deben ser tenidas en cuenta por los viajeros como son el paludismo, la malaria, las fiebres tifoideas, la enfermedad de Chagas y la filariasis.

Ante estas situaciones se establecen una serie de recomendaciones generales frente a las parasitosis en viajes: